Examen de Lilith Dreparon

Usuario: Lilith

Rango pedido: Ex-Capitána - Dueña de la Tienda

Nivel de Rol: Muy Alto.

Consigna: Describe el dia en el cual tuviste que irte de la SS y los problemas que tuviste en el Mundo Humano al llegar. (.Cualquier uso de PNJs serian controlados por ti.).


Buona fortuna!

Hemera se marchaba para dar paso a Nix, el viento aun frio de aquella noche recién despertada movía sus cabellos con suave frenesí, aquella suave cabellera rubia platinada cubría en parte su rostro que ocultaba un par de zafiros monótonos, vestida sencilla mente con su traje negro típico de Shinigami que se agito en un movimiento de ella al comenzar a caminar con sigilo, como si no quisiera ser descubierta por nadie más, miro al cielo y no se atrevió a ver lo que a sus espaldas se dibujaba.

-Lilith-Dono… no cometa esta acción, será peor aun su sentencia…

El paso de la Shinigami se vio detenido por una mujer mayor, con la cabeza cubierta de blanco y los años reflejados en sus arrugas, los ojos cansados de la anciana trataron de mostrarle amor maternal a la jovencita, mientras ella mostraba no más que la sola determinación, los últimos pétalos de cerezo caían, antes de que el invierno tocara a las puertas de la Sociedad de Almas, Ironico, Invierno en aquel lugar y también Invierno en el corazón de la Capitana, o mejor dicho ahora Ex – Capitana.

-segura mente comprenderán y entonces sabrán que no has cometido aquel error…Lilith-Dono…

La voz cansada y suplicante de aquella mujer no funciono, y aun que al oír aquellas palabras Lilith sintió una punzada en el pecho, sola mente su acción fue continuar de largo no sin antes hablar, y girarse completa mente en un acto desesperado y abrazar a la senil, sus brazos estrecharon aquel cuerpo cansado que por años habían estado a su servicio como su mano derecha, como una madre que siempre aconsejaba, pero esta vez Lilith debía volar… de sus zafiros se desplegaron algunos cristales líquidos y salados, comparados con finos diamantes que acariciaban sus mejillas.

-Adiós, Mikka-San, gracias por todo…

-Adiós mi niña…cuídate.

Fue lo último antes de que Lilith se separase bruscamente de aquella anciana llamada Mikka, e inmediata mente con un shunpo se desvaneciera comenzando su huida, las memorias de todo lo vivido en la Sociedad de Almas pasaron por su mente como lentas diapositivas, el dolor que sentía no ardía, no punzaba ni quemaba, sencilla mente dolía, era algo nuevo para ella.

En sus oídos aun susurraba el sonido de una cajita musical, y con la última nota y cerrar de la tapa Lilith colapsó, cayendo sobre sus rodillas, quizá en mucho tiempo la capitana experimentaba por primera vez el miedo. Pero no temía por su vida, sino por aquellos a quienes dejaba atrás, pero sabía que aquello era lo mejor, y el trago amargo de aquel sentimiento de pena y dolor le pasó espesa mente por la garganta haciéndola suspirar; preparándose para atravesar por la delgada línea entre la Sociedad de almas y el mundo Humano. Se irguió en la cima de una roca y observo por última vez las luces de la Sociedad de Almas, la luz plateada de aquella luna y sintió en su frágil cuerpo la brisa nocturna…

Posiciono sus manos en su pecho y sintió su respiración, sincronizo cada respiro, cada latido de su pecho que se sentía con adrenalina y al mismo tiempo la amarga melancolía, pero debía mantener el sentido común, sus facciones se dibujaron serenas y sus ojos azules se cerraron, la concentración igual mente bailaba al ritmo que sus latidos y la ya apaciguada respiración que emitía.

Final mente un umbral tan brillante como el astro rey se materializo frente a Lilith, su rostro níveo fue cubierto por la cegante luz que daba pauta a pasar a través de él para llegar a su destino, sabía que debía apresurarse pues aquel gasto y uso de su riatsu seria una pista evidente de que había huido al mundo Humano, se había detenido justo a dos pasos de la entrada que ahora se convertía en el punto de partida, su visión trató de indagar más allá de la distancia, y ampliaba su sentido de la vista tanto como podía buscando un algo abstracto que no conseguía, apretó sus puños con toda la fuerza que tenia y entro inmediata mente a aquel portal entre los dos mundos, y la puerta se cerro, no había mas rastro de ella.

La luz incomodaba sus ojos, una sensación de pesadez era portentosamente inaguantable, la condición atmosférica se sentía tan diferente a la de el lugar que abandono, fácilmente sentía una asfixia que atacaba a su aparato respiratorio. Colocó una de sus manos sobre su pecho, respiraba despacio y con un poco de dificultad, abrió lenta mente sus ojos y noto el paisaje borrosa mente, colores amarillos, cafeces y rojos se contrastaban con el azul del cielo, el otoño iba a dar paso al invierno… Lilith se levanto con pesadez, todo le daba vueltas, había sido un viaje demasiado apresurado, de haber sido alguno de rutina no le habría costado, pero aquel viaje fue de improviso y para salvar su vida misma, lo que lo hacía mas dificultoso.

-Bien… estoy aquí.

Su voz estaba mas inexpresiva de lo normal, aquel brillo que le caracterizaba en sus ojos no estaba, pero la determinación de continuar adelante con su decisión le dio la fuerza necesaria para emprender un nuevo viaje… parecía que todo marchaba bien, hasta esos instantes nada se había interpuesto en su camino, las cosas parecían tranquilas… se levanto del frio suelo y observo que todo en ella estuviese en orden y asa mismo fue, ni un solo error o imperfección se marcaba en su silueta.

Al comenzar su andar observo las estructuras arquitectónicas que decoraban ese nuevo mundo, noto la obvia diferencia entre su antiguo hogar y su ahora escondite, como infante, sintió la curiosidad de conocer aun mas, pues no todos los días tenia la degustación de recorrer las coloridas calles de esa ciudad, aun a pesar de saberse fugitiva y que en cualquier momento pudiese ser capturada o perseguida por los de su misma raza Lilith desvió aquella angustia por unos instantes; parecía como niña al mirar todo lo que le rodeaba, pero aquella diversión se esfumo cuando a la vuelta de la esquina se topo con una sorpresa nada agradable.

-Creo que no es mi día de suerte.

Mirando fija mente al ser que le bloqueaba el paso, mejor, aun cuando miro de reojo a sus espaldas no era solo uno, si no 3 Hollow que amenazadores clavaron sus miradas hambrientas en el frágil cuerpo de la muchacha, ella suspiro aun asimilando lo que había encontrado, reflexionando muy poco sobre si habría sido buena idea ir a la boca del lobo, pero era eso, o dejarse perecer en las propias manos de aquellos que se decían su familia y que ahora le acusaban de algo erróneo. Pero ese no era el tema, Lilith inmediata mente busco en su cadera aquella fiel arma que siempre le acompañaba, Taiken, y aun que no podía usar su poder “La Cazadora” podía emplear sus evidentes habilidades de pelea, parecía que el tiempo no corría y miro a cada segundo los movimientos realizados por los Hollow, parecía como una película en cámara lenta cuando suave mente Lilith desenvaino a Taiken, y todo fue acelerado e imperceptible a un simple ojo humano cuando uno de los Hollow cayo partido por la mitad y solo observando como la Shinigami enfundaba su Zampakutoh así como la había desenvainado.

Uno menos, faltaban dos más, pero estos eran más astutos, algo que ante los zafiros de la mujer le fue de considerable sorpresa uno de ellos parecía un perro cubierto por una estructura ósea y de proporciones considerables al tamaño de Lilith, y el otro parecía como un centauro , pero no fue suficiente para desequilibrar a la mujer, quien de sobra sabia que en el mundo humano sus poderes estaban limitados… e inmediata mente busco algo, observo y como caído del cielo una Humana regaba sus plantas en el segundo piso de unas instalaciones departamentales, el agua mojo a los Hollow que no lo tomaron en cuenta, pues Lilith era un premio grande para desperdiciarlo en un simple mortal. La shinigami libero de el guante metálico su mano diestra, moviendo en circulos el puño, abriendo plena mente la palma de la mano y moviéndose sin siquiera ser percibida toco la espalda de uno de aquellos seres… el centauro, y este solo rio con su gutural y grotesca voz, seguida mente… el silencio.

Ante los ojos del otro Hollow su compañero había quedado callado cuando toda el agua que le cubría se cristalizo, y antes de poder siquiera reaccionar sintió como ocurría lo mismo con el mientras miraba salvaje mente a la causante de su perecer, quien se colocaba nueva mente su guante que bloqueaba aquel misterioso poder que horrorizaba a todo enemigo que se topara frente a ella.

-tengo que irme antes de que mas de ellos me localicen, y con ellos vengan los Shinigamis para buscarme…

Y apresurándose como felino subió por las casas para perder su rastro de otras entidades, el día comenzaba a tornarse dificultoso y no solo por los Hollow que merodeaban y le seguían por su poder espiritual, si no porque ahora no sabía a dónde pasar la noche, caminando con el estomago vacio y pidiendo que comer miro un espacio vacío entre dos unidades de departamentos, recapitulándolo todo, ahora ya más tranquila lo recordó…aquel del 12° escuadrón, si, ese loco capitán que no hacía más que experimentos y ese tipo de cosas extrañas le había entregado algunos artefactos antes de su huida, y graciosa mente posiciono un rostro de “Esto es Genial!”

Si, quizá pudo haberse ahorrado muchos problemas, claro de haber estado lo más serena posible, pero quien en su situación de fugitiva podría mantener instantáneamente la calma, pero no había más que pensar, suspiro y busco entre sus bolsillos, encontrando ciertos artefactos de los que ni el nombre recordaba exacta mente, pero si sus métodos de uso. Camino adentrándose en el terreno y coloco 4 varitas en 4 puntos que servirían como pilares para sostener la construcción y la barrera que impediría que fuese detectada, con sigilo y sin perder su elegancia camino al centro, sus ojos azules se cerraron, y coloco sus manos en el pecho, solo tenía una oportunidad, pues al elevar su riatsu lógica mente seria encontrada, alzo el rostro al cielo y abrió los ojos, lenta mente su energía espiritual abandono su cuerpo cubriendo el terreno que había marcado, una sensación de desgarre se apoderó de su sistema nervioso. El apretón de dientes evitó que un desesperado grito abandonara su garganta y aturdiera el momento de silencio, siendo como si su vida estuviese siendo devorada feroz mente, pero sabía que lo era todo o nada.

Todo en sus ojos se nublo, las fuerzas abandonaron su cuerpo y sus músculos se tensaron, experimentando una nueva sensación cayó al piso de forma pesada como una muñeca tratando de respirar y recuperar el oxigeno perdido, observando a su alrededor, todo había salido que ella lo quiso, pero a cambio de ello, le costó un desgaste brutal de su Riatsu que con unos días de descanso recuperaría. Lilith miro sus manos que aun temblaban y estaban pálidas, palpando sus mejillas noto que estas aun seguían tibias, esbozando una perceptible sonrisa, aun que melancólica, ella debía de ver por un nuevo mañana, olvidando por momentos todo aquello que había dejado atrás.
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Spoiler:

Perfecto, mai frend el puesto es tuyo, ya que Ailann no presento su examen a tiempo.

Paso a darte el colour y el rank.

Saludos.

PD: Congratz...